Guillermo Pena de todo un poco

VERDAD

El Color

A los fines de esta reflexión no me importa considerar el color en su aspecto científico, como descomposición de la luz,
que nos revela el prisma de cristal por el que Newton hizo pasar un rayo solar. Ni siquiera es un tema que entiendo demasiado ya que no investigué mas allá de lo que necesité saber para el ejercicio de la pintura.

El Calor

Quiero hablar específicamente en esta oportunidad de una de las propiedades de los colores: "el calor" y de su relación con la verdad.

La Luz

En la naturaleza la propiedad “caloristica” de los colores están relacionadas con la "calidad" de luz que reciben.
La luz y el calor son propiedades del sol, el calor lo sentimos, la luz la vemos. Es muy raro valorar un efecto del sol como la luz y no valorar el otro. Es muy extraño que se pueda pensar estar mas caliente en la oscuridad que en la luz, o pensar que se puede estar fríos cerca del sol o del fuego.

Colores Calidos y Fríos

Existen en la naturaleza -verdadera obra de arte- colores vitales, activos, estimulantes, calientes. Se siente en esos colores, la presencia del principio de luz: el sol. Que es ardor, fuego y luz. Y se vincula estos colores con la alegría, la salud, la fuerza, y existen por el contrario otros colores que son sombríos, oscuros, fríos que se vinculan con la tristeza, la muerte. En el medio de estos colores calientes y fríos encontramos la gama de los calidos: Los celestes, los verdes, colores serenos, apacibles, sedantes, tranquilizadores.
Aunque en el lenguaje técnico de la pintura solo se dividen en calidos y fríos. En el circulo cromático los calidos abarcan toda la gama de amarillos, naranjas y rojos. Y los fríos toda la gama de azules, verdes y violetas. Esta propiedad de los colores calidos esta dada por su proximidad con la luz, y los colores fríos por estar mas alejados de la luz y mas cercanos a la oscuridad (o a la falta de luz).

La Luz y el Calor de la Verdad

La Luz la vemos, por eso el pensamiento goza con la luz, pero no todo pensamiento es luz, por muy atractivo que nos parezca. El calor no lo vemos pero lo sentimos, por eso el calor es gozo del sentimiento. El sentimiento de amor tiene la propiedad de dar calor, no es frío, es calido, como los colores, por estar cerca de la luz. Y es muy extraño también que se pueda amar mas en la oscuridad. El conocimiento es luz, es vida, pero cuando nuestros conocimientos no nos llevan al amor sino a la indiferencia entramos en las zonas oscuras de la frialdad y allí no es difícil encontrase con los odios y la muerte.
El sentimiento de amor, que es calido y que puede llegar a ser ardiente en el ejercicio del Amor es la guía rectora de todas las cosas pensadas. Diga lo que se diga, la luz y el calor son propiedades inseparables no solo del sol sino también de la verdad.