08 febrero 2010

DESPRENDIMIENTO

Según entiendo y observo:

La búsqueda de felicidad le da sentido a la vida, y la libertad la hace posible.
En la balanza de la vida, la libertad está en el platillo opuesto al del desprendimiento. A medida que nos desprendemos de lo que nos ata vamos quitando peso a la existencia e inclinando la balanza hacia la liberación. Pero por lo visto, siendo la misma, toda acción de desprenderse, muy distintas consecuencias trae, según el objeto u objetos de los cuales uno se desprende. Si la libertad se entiende reducidamente, o sea, solo bajo el aspecto de liberase de ataduras externas y circunstanciales, esa liberación es imposible, puesto que son incesantes e infinitas las circunstancias en las que la vida nos coloca. Además, sumamente agotadora y desesperanzadora, porque esa liberación es como el espejismo de una realidad que nunca llega. En cambio, si el desprendimiento es sobre aquellas cosas que si podemos abarcar, y dominar, el éxito es posible. El desprendimiento de nuestras propias ataduras interiores.

La primera cadena a romper seria la psicológica. Y es la razón, con colaboración de la voluntad, (sin voluntad no se puede llegar a nada) la que debe desprenderse de la psicología.
La psicología nos tiende trampas continuamente, -estoy hablando de personas relativamente normales, los que sufren trastornos y perturbaciones es muchísimo más acentuado- nos tiende trampas haciéndonos creer que hay cosas que tienen un valor imprescindible y sin embargo no valen lo que aparentan, y por otro lado hace que le demos escaso valor o ningún valor a otras que si lo tienen, y son de capital importancia  El caso típico más absurdo, es el espejismo que vive la persona de setenta u ochenta años que sigue acumulando poder y dinero cuando en cualquier momento lo tiene que dejar todo. La psicología funciona así porque está pegada a lo corporal y como es sensible quiere darle a su “pareja” las mayores satisfacciones. Y nos tiende trampas continuamente para evitar lo que nos cuesta e inclinarnos a lo fácil y placentero.  Nos insinúa íntimamente: “no te compliques!! no pienses más! vivi la vida como viene!!  “distraete!” “difrutá de la vida!!  “Nooooo!!, que estás pensando??  –nos dice- ¿sabes el trabajo que te va a costar?”  “date un gusto!!”,  que tiene de malo... una satisfacción!  Y quizás, eso que nos da satisfacción hace mal a alguien, quizás nos hace mal a rostros mismos, pero si no pensamos...no nos enteramos... Y si nos viene a la cabeza,  nuestra psicilogía tiene más y más justificaciones para convencernos... y nos gusta escucharle... porque nos gusta la excitación que nos provoca, será la famosa adrenalina?. Yo diría nuestras cadenas!! Y así vivimos, esperando una libertad que nunca llega y desilusionándonos, comprobando que no es más que un espejismo.

Hay algo que debería ser de sentido común: “que lo que vale cuesta”
¿Crees sinceramente que a la felicidad se llega tan fácil como,  con una libertad que evita todo compromiso, porque lo único que vale es la satisfacción de un comodo vivir?

No hay comentarios.: