27 enero 2010

LIBERTAD

Según entiendo y observo:

El alienado es un ser inconsciente de si mismo, es mucho peor que un ser privado de su libertad, puesto que lo que perdió es su libertad interior.
A la alienación se llega por falta de ejercicio intelectual, la pasividad o pereza mental lleva a no discernir entre las cosas que continuamente nos llegan y que, por la tendencia a lo fácil que todos tenemos, nos quedamos con lo aparente y nos parece bien. Asimilamos lo que dicen sin pasarlo por el tamiz de nuestro propio análisis o un análisis deficiente. El insuficiente concepto de libertad que hoy tenemos hace que no comprendamos las enormes posibilidades de ser libres que cada uno tenemos y que no la aprovechamos, no solo por éste error de concepto, sino por no haber hecho nada en lo personal por averiguar la verdad.
En éste sentido podemos decir que la verdad hace libres, pero el mayor problema que a la verdad no se llega por la vía de la inteligencia si esta no esta unida a una disposición interior inclinada hacia lo bueno, lo verdadero y lo bello. Una disposición que no entiende de razonamientos, ve o no ve, es o no es, en el fondo un gran misterio. Por esto, lo que garantiza estar en la verdad tampoco es trasladable a otra persona, aunque lo podamos trasmitir.

Pero estar en la verdad no es ser libre en el sentido de “libre completo”, puesto que esto solo le es posible solo a los que se liberan totalmente de la materia y eso no es posible mientras estemos unidos a un cuerpo material y social.
A la verdad se llega, -aún en medio de enormes imperfecciones y errores- por el camino del bien ajeno, cuando vamos ejercitándonos pacientemente en acompañar a la buena disposición con buenas obras, y a las buenas obras con razonamientos acordes. Podríamos conocer millones de personas que han sabido llevar a la práctica su ideal de libertad, que nos podrían servir de ejemplo. Solo hace falta buscar donde corresponde.

El hombre es un ser integral que como tal, cuando el intelecto avanza con independencia del resto - buena disposición y conducta- termina siendo un monstruo egocéntrico, aunque su semblante externo sea limpio y prolijito.

1 comentario:

Anónimo dijo...

La libertad (supuestamente interior) se da cuando una madre le dice (como es posible tal condicion ante una realidad saciada a cada segundo) a su hijo, no dependes mas de mi; es mas a partir de ahora debereis transitar solo.

Epalala, eh; hasta ahora ente mis gritos saciabas mis necesidades..quien dice que a partir de ahora debeis cortar el vinculo??????

Siempre que gritaba y lloraba estabas ahi.
Por que esto debe cambiar?????????????

Es acaso el principio del fin?????????