17 enero 2009

VERDAD

El mundo es uno si se cree en la verdad y otro si no se cree en ella. El mundo de hoy es un mundo donde la inmensa mayoría cree que todo es relativo, que existen muchas verdades y ninguna en forma absoluta, y que por eso cada uno puede tener su verdad.
Si se conociera y reconociera la verdad el mundo seria hoy otra cosa. La verdad es la palabra clave para entenderlo y entender lo que nos pasa. Y la verdad no se conoce y no se reconoce porque no se quiere, aunque parezca que no se puede.
Mucho se a especulado sobre esta palabra a lo largo de la historia del pensamiento, mucho se ha escrito, mucho se sigue escribiendo en torno a esta palabra.
De la verdad se puede hablar mucho, pero una cosa es cierta, que si yo mate a una persona y digo que la encontré muerta estoy mintiendo, si en cambio digo que yo la maté estoy diciendo la verdad, Que yo maté a esa persona es una verdad absoluta y objetiva, porque no pude haberla matado mas o menos, la maté o no la maté.
Y cuando decimos que cada uno tiene su verdad lo que estamos haciendo es simplemente confundir los términos, ya que lo que en realidad es, que cada uno tiene una versión personal de los hechos. Unos pueden opinar que lo maté, otros que lo mató el vecino, otros que se suicidó, etc. pero eso no significa que haya varias verdades, son solo versiónes, hipótesis, y no lo podemos llamar verdades.

El cambio de óptica seria el siguiente:
¿Que tal si en lugar de poner en duda la verdad empezamos a discutir sobre la dificultar de descubrirla?

Si alguien se le ocurre embarrar la cancha y cambiar la palabra “dificultad” por “imposibilidad” que no se le ocurra ya que esto esta comprobado que es posible. Solo hace falta buscar donde corresponde. Aunque si debo reconocer que hay una imposibilidad real que algunos no entiendan o no quieran entender, especialmente aquellos que viven de la mentira.


La Mentira

La mentira a diferencia de la verdad si puede ser relativa y subjetiva, porque puedo decir muchas cosas sobre este mismo hecho, que lo mató el vecino, que se suicidó, que no se sabe quien lo mató, etc.
La mentira es uno de los males mas detestable. El que miente cada tanto por debilidad o por falta de heroísmo, es sumamente comprensible y no es un ser detestable por eso, aunque mejor seria que no mintiéramos nunca. Sabemos que somos imperfectos y para no salirnos de la realidad es bueno aceptar la realidad de lo que somos.

Pero que diferencia entre este y aquel que miente por afición a la mentira, o aquel que mas que aficionado es todo un profesional, que se aprovecha de ella y de la buena fe de los demás para sembrar la mala fe, que vive simulando ser buenos para engañar y vivir de ella. Que sabe perfectamente que miente y no le importa. Este si es un ser detestable.

Hay veces que aún aquellos que nos consideramos buena gente no podemos sobreponernos a la debilidad de mentir, que sabemos que no debemos defraudar la buena fe que los demás nos tienen y sin embargo lo hacemos. Somos hombres, ni ángeles, ni demonios. Aunque algunos están mucho mas cerca de los segundos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Grande, Guillermo.
Me enteré por Lorenzo y no pude dejar de visitar tu blog.
Buenas reflexiones.
Un abrazo
Pascual